Esperanza Gomez
Bio
Los tapices confeccionados con caraguata presentados por Esperanza y Elsa Gómez, así como por Jorgelina Ruíz, representan a las voces del arte indígena del Paraguay.
La etnia Manjui, en Pedro P. Peña, Chaco Paraguayo produce objetos de arte que representan a figuras o animales de los rodean. Su comunidad tiene forma circular, normalmente con familas emparentada, donde la reciprocidad de compartir alimentos y trabajos e vital para su supervivencia.
Estos tapices, al escenificar la mitología indígena fueron confeccionados teniendo en cuenta la dificultad para obtener la materia prima (la fibra) debido a las constantes sequías de los últimos años.
Statement
Los tejidos de Caraguatá se encuentran únicamente en comunidades indígenas del Paraguay, sobre todo en el Chaco Paraguayo, donde, según el pueble indígena al que pertenezcan, son las mujeres artesanas las que lo trabajan de diferentes Maneras.
Los pueblos indígenas principales productores de la fibra de caraguatá son: Ayoreo, Nivaclé, Ishir, Manjui, Enxet Sur; Enlhet.
La fibra es extraída de una especie de Bromeliácea (Bromelia Hieronymil) y la planta completa es enteramente aprovechada , ya que sus raíces sirven también de alimento. Las hojas de la planta son presionadas en todo su largo hasta extraer toda la Humedad, hasta que las hojas queden secas y largas. Estas fibras se lavan y secan al sol, para luego ser teñidas con pigmentos naturales, hiladas y tejidas a mano. La estructura de los tejidos, los patrones y colores hacen la diferencia entre cada Pueblo indígena. Así por ejemplo, los tejidos del Pueblo Ayoreo al igual que los tejidos Ishir utilizan principalmente el rojo y el negro junto con el color natural del a fibra, bien blanqueada. Los nivaclé y los Manjui trabajan las gamas de los marrones, amarillos e incluso verdes. Los Enxet y Enlhet mantienen la mayoría de las veces sus tejidos en el color natural de la fibra.
Información adicional
El karaguata es una fibra obtenida de una especie de Bromelia ( Bromelia hieronymi) en extinción en la región del Chaco Paraguayo, la planta es enteramente aprovechada ya que sus raíces sirven también de alimento, las hojas son presionadas en todo su largo hasta extraer toda la humedad hasta que queden secas y las artesanas de las comunidades indígenas tejen las fibras hasta llegar a obtener piezas de únicos matices contemporáneos que simbolizan el lenguaje de la etnia.