Debbie Reda
Bio
Debbie Reda nació en Buenos Aires, Argentina en 1976, y vive y trabaja en Madrid, España.
Es licenciada en Historia del Arte y Curaduría de Gestión Cultural. Trabajó desde muy temprano en la industria de la moda, asistiendo, dibujando y bocetando colecciones para importantes modistos. Pintora autodidacta, dibuja profesionalmente desde los 17 años en la industria de la moda y pinta desde 2013 cuando realizó su primera exposición individual en Argentina.
Debbie Reda es una artista reconocida internacionalmente. Su obra pertenece a colecciones de todo el mundo. En octubre de 2021 formó parte del Salón de Honor en la Feria de Arte WWA en Shanghái clasificada por votos de coleccionistas chinos entre los 40 artistas de moda en el mundo.
Statement
Tomando como referencia la influencia del Art Brut, del dibujo y la pintura de niña, el fenómeno de la repetición aparece en su obra abstracta citando el patrón de ejercicios repetitivos cuando uno aprendía a dibujar de pequeño, o los movimientos o figuras inspirados en los juegos de mesa que solía jugar con su abuelo.
Información adicional
Debbie Reda como en toda su obra cita a la infancia, el juego y la diversión. Estas obras parten de la inspiración de juegos y juguetes que utilizaba de niña y en especial los patrones de juego, formas y cuadriculas propias de los tableros de juegos de mesa.
De la influencia del Art Brut tomo la multiplicación mecánica del fenómeno de la repetición, propia de los patrones de ejercicios, del vaivén del crayón o el lápiz, al momento en el que aprendemos a colorear o dibujar.
Esta serie, denominada “Tableros”, consiste en un grupo de trabajos en los que hay una sumatoria de motivos decorativos encerrados en bloques, ajedrazados, rayados, punteados, con variaciones de color y diferentes direcciones, cuya combinación puede ser inacabable. La repetición no implica la realización de lo mismo. Es la letanía de la persistencia que se vuelve significativa, cuando descubrimos la diferencia sutil entre una imagen y otra, entre una acción y otra.
Cuadro por cuadro, se rellenan con operaciones simples, a mano alzada. El resultado es un conjunto de módulos compuestos de forma azarosa y lúdica, como una posible combinatoria compositiva.
Al hablar de repetición de un patrón o forma, hablamos de automatismo y éste, como movimiento insistente, provocando un ritmo en la acción. La acción se transforma casi en una meditación. Con movimientos intuitivos, cada cuadro o figura se va realizando como cuando se avanza con las fichas sobre un tablero.
Los collages, parten de haber realizado estas mismas operaciones sobre un papel de grs. Y luego de manera azarosa se recortan, se juega con ellos, se deconstruyen.
Esta acción de construir una figura a partir de los tableros recortados, cita las tardes de niña cuando hacia collages con mi abuelo. En algún punto se trata de reconstruir la memoria del juego y la infancia. El resultado es una combinatoria de formas azarosas que en su unión forman otras figuras que parecen jugar entre ellas. Una manera de hacer un pasaje lúdico entre la abstracción y la figuración para al final decir lo mismo.
2.5 x 4m / 98.4 x 157 in